El artículo de hoy y los dos próximos van a ser un poco distintos. Voy a hablar de un viaje a Ecuador. Os cuento porque:
Desde hace un año escribo semanalmente este Blog. Es cierto que publico artículos desde hace 9 meses que abrimos La Sala De Espera, nuestro blog dedicado a la psicología aplicada al día a día, pero empezamos a escribir artículos para tener preparado el lanzamiento hace un año.
Tenemos claro que escribimos sobre psicología y sobre lo que aprendemos en nuestro día a día pasándolo por el filtro del análisis del comportamiento humano y su comprensión, pero, con tu permiso, voy a darme una licencia y los próximos artículos que voy a escribir van a ser más personales, a caballo entre una bitácora personal y un blog de viajes.
Este cambio se debe a que, junto con mi compañera Isabel Serrano (compañera en WebPsicólogos y compañera en la vida), nos vamos casi un mes a conocer un país apasionante: ECUADOR.
Y me apetece compartir contigo los motivos del viaje, cómo lo estamos preparando y qué esperamos de él.
Inicio
Este viaje a Ecuador comienza hace ya unos cuantos años. Comienza cuando, Don Amando, párroco del pueblo de Isabel y buen amigo, decide dar un giro a su vida e irse a vivir a Ecuador a trabajar en el desarrollo de comunidades indígenas y aisladas.
Desde aquel día tuvimos claro que cuando se dieran las condiciones (de tiempo y dinero principalmente) iríamos a visitarlo y a tener la suerte de conocer a personas que viven de una manera muy distinta a la nuestra y aprender todo lo que estoy convencido que vamos a aprender.
Han pasado varios años y la idea siempre ha estado ahí y, finalmente, en el mes de Abril, cogemos vuelo a Ecuador destino la Misión de Viches, cerca de Esmeraldas, al norte de Ecuador.
Plan de Viaje
La idea del viaje a Ecuador es sencilla (ya os contaré si ha sido cómo lo hemos planeado o no). Volamos a Quito y vamos a aprovechar 5 días para conocer la ciudad, sus gentes y su entorno. A falta de 15 días de irnos aún no tenemos decidido que vamos a hacer exactamente esos 5 días (acepto sugerencias), pero ya tenemos cerrado el alojamiento que es lo que más nos preocupaba.
A través de AirBnB (si no lo conocéis, el sábado os explico cómo funciona este portal para alojarse en pisos y casas de personas que viven donde vas a viajar), hemos contactado con Marco e Iciar que, aparte de alquilarnos su casa, están totalmente entregados en ayudarnos a decidir que hacer y cómo organizarnos en Quito.
Es una de las grandes ventajas de alojarte en casa de alguien, que aparte de un sitio para dormir, conoces personas que están dispuestas a echarte una mano para que tu experiencia en la ciudad que visitas sea mejor.
Después de estos cinco días volamos a Esmeraldas donde pasaremos 3 semanas conociendo la Misión De Viches y visitando a comunidades que viven en la ribera del río Viches. Si os digo la verdad, no tenemos muy claro que nos vamos a encontrar ni cómo van a ser esos días. Y sinceramente, me encanta esta incertidumbre.
La semana que viene os seguiré hablando de este viaje a Ecuador y cómo lo estamos preparando.
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