Estas navidades han sido momentos de encuentro con españoles por el mundo, para mi mas que movilización exterior son eso, familia y amigos.
Hablando con uno de ellos, nos planteó la posibilidad de hablar de WebPsicólogos a aquellas personas que, por diferentes motivos, han tenido que irse de nuestro país a empezar una nueva vida.
Empezar una nueva vida parece tener una connotación romántica, pero en realidad el cambio que muchos buscan fuera de nuestro país conlleva dificultades que hacen que interpretemos ese cambio, como un problema y no como una oportunidad.
Tomar la decisión de marcharse no es fácil.
No se decide en un «plis-plas», sino que es a lo largo de un proceso de reflexión y de valoración del momento actual y del futuro próximo. Algunos se han marchado para continuar estudios, otros para encontrar trabajo, otros para perfeccionar el idioma y también por amor…el motivo por el que se decide no hace que la situación sea fácil. En todos los casos se va a un nuevo país, diferente al propio, con otro idioma, con otra cultura y diferentes costumbres, los horarios cambian y la alimentación es diferente.
También hay un distanciamiento de los seres queridos, la familia y los amigos, los grandes pilares en nuestro crecimiento personal y social se encuentran a miles de kilómetros.
La adaptación es dura.
Muchos de los programas sobre viajeros españoles por el mundo, nos muestran la cara bonita del cambio, pero no tanto las dificultades. Se ha vendido que marcharse al extranjero era la gallina de los huevos de oro, generando bastante confusión ante la idea de quedarse o marcharse.
El planteamiento de una orientación basada en un proceso de duelo por lo que cambia, no por lo que desaparece, puede permitir una aceptación y adaptación a la situación.
Los procesos de duelo ayudan a reconstituir a las personas ante los cambios que se interpretan como pérdidas. Las emociones que pueden evocar esos cambios son, entre otras, el miedo y la tristeza, que aunque tienen una connotación negativa no significa que sean buenas o malas, más bien que nos resistimos a ellas. Todo esto acompañado de incertidumbre ante lo que dejo y ante lo que vendrá…
Las emociones nos las provocan los acontecimientos, o más bien, la interpretación que hacemos de ellos pero racionalizar las emociones, es decir, buscar pensamientos que nos las validen, pueden permitirnos avanzar en la reinterpretación de los sucesos que nos ocurren.
Tener miedo o estar triste ante algo que cambia es normal, señal de que sentimos y de que no somos rocas en la montaña. Las emociones ante aquello que nos ocurre no han de ser temidas sino gestionadas. Gestionar las emociones es dejar sentirlas sin temerlas, para posteriormente decidir qué hacer con ellas.
Con esto no quiero decir que la intervención con WebPsicólogos es tan eficaz que dejarás de tener miedo y de estar triste, estaría mintiendo. El miedo nos protege y la tristeza permite lamernos la herida para posteriormente resurgir de las cenizas, todas las emociones desempeñan una función.
El acompañamiento en el afrontamiento y en la toma decisiones usando las nuevas tecnologías, es otro de los objetivos que nos planteamos como equipo, ante la posible necesidad de aquellos paisanos españoles que empiezan una nueva vida.
pues luego resulta que no queremos volver. o volvermos de turistas a gastar en los bares y eso… como los suecos! jejeje. aún así, os echamos de menos
Pues ya sabes Emilio. Hazte extranjero.
Mola la web muchachos. Buena idea. Seguid así.
Un fan.
Gracias por vuestros comentarios y vuestro apoyo!